jueves, 16 de febrero de 2023

¿Son reales las emisiones que declaran los híbridos enchufables? Un estudio da su veredicto...

Los modelos de coches híbridos enchufables se benefician de unas emisiones de gases homologadas muy bajas. Sin embargo, esos niveles de CO2 tan bajos se consiguen en unas pruebas de homologación de pocos kilómetros y en unas condiciones idóneas que son difíciles de conseguir en la realidad. 

De hecho, un estudio realizado por la entidad ecologista Transport & Environment (T&E) ha dado como resultado que los híbridos contaminan hasta un 70% más de lo anunciado oficialmente.

T&E encargó el desarrollo de los test a la Universidad Tecnológica de Graz, en Austria, con tres modelos híbridos enchufables recientes: BMW Serie 3, Peugeot 308 y Renault Mégane. Los resultados apuntan que todos los modelos emitieron más dióxido de carbono (CO2) del anunciado cuando se probaron en carretera.

"El BMW contaminó hasta el triple de su clasificación oficial en un trayecto interurbano típico. Los híbridos enchufables Peugeot 308 y Renault Mégane obtuvieron mejores resultados, pero siguieron contaminando un 20% y un 70% más de lo afirmado, respectivamente, a pesar de la distancia relativamente corta de ida y vuelta recorrida (55 kilómetros)", asevera el informe.

Autonomía real en modo eléctrico

Según el análisis, en circulación por ciudad el Peugeot presentaba "algo más de la mitad (53%) de la autonomía eléctrica anunciada con una carga", mientras que el BMW exhibía el 74% y solo el Renault tenía la autonomía eléctrica afirmada.

Los coches híbridos que contaminan menos y los que más T&E también apunta que el BMW ha introducido una nueva tecnología que cambia automáticamente a conducción 100% eléctrica al circular por las ciudades, sin embargo, "cuando se probó en Graz el BMW Serie 3 encendió el motor dos veces".



Por otro lado, T&E y Ecodes indican que los coches de empresa representan el 71% de las nuevas ventas de turismos híbridos enchufables y subrayan que "los estudios demuestran que recorren la gran mayoría de los kilómetros con el uso del motor (de combustión) y rara vez se cargan". "Cuando se probaron el BMW, el Peugeot y el Renault con la batería vacía, emitieron en carretera entre 5 y 7 veces su cantidad de CO2 afirmada", agregan.

Subvenciones a los híbridos enchufables

"Los híbridos enchufables se venden como una solución para reducir las emisiones, pero las pruebas en condiciones reales demuestran que no es así. En las pruebas de circulación por ciudad, solo uno de los PHEV (híbridos enchufables) tiene la autonomía eléctrica anunciada, mientras que los tres emiten más de lo afirmado en trayectos interurbanos", ha asegurado el responsable de transporte y movilidad de Ecodes, Cristian Quílez.

Por ello, T&E ha instado a los gobiernos a que dejen de subvencionar los híbridos enchufables y que se les aplique un impuesto en función de su contaminación real. "Estamos ante otra prueba más que afecta directamente a políticas de descarbonización del transporte y de movilidad en ciudad como, por ejemplo, las zonas de bajas emisiones o las etiquetas para vehículos de la DGT (Dirección General de Tráfico), las cuales no deberían tratar de igual manera los PHEV y a los BEV (eléctricos puros)", ha añadido.

Según el informe, España dedicó 21 millones de euros el año pasado para subvencionar la compra de vehículos híbridos enchufables de BMW, Peugeot y Renault. El Plan Moves 3 prevé una ayuda de 5.000 euros por la compra de un híbrido enchufable, frente a 7.000 de un eléctrico, a cambio de achatarrar un turismo viejo.

Etiqueta ambiental equívoca

"Mientras tanto, los vehículos de segunda mano que realmente son cero emisiones siguen sin estar incluidos en el Plan Moves (de ayudas públicas a la compra), cosa que ya pasa en Francia. Esto, sumado a la obsoleta fiscalidad de los vehículos, la cual no diferencia entre los 100% eléctricos y los híbridos enchufables, es un claro indicador de que hace falta realizar cambios urgentemente", lamentan desde T&E.

Asimismo, la organización considera que el objetivo final debe ser incentivar la adquisición o el uso de vehículos que "verdaderamente" no emitan CO2. "Los híbridos enchufables no deben tratarse como vehículos sin emisiones (...) Los impuestos de los vehículos híbridos enchufables particulares y de empresa deberían basarse en la reducción real de CO2 que brindan. Los gobiernos deberían dejar de subvencionar la compra de vehículos híbridos enchufables en flotas y, en su lugar, deberían alentar a las empresas a utilizar coches eléctricos de batería", ha destacado por su parte el experto en electrificación de flotas corporativas de T&E, Óscar Pulido.