La eurodiputada Pilar del Castillo, perteneciente a la Comisión de Industria, Investigación y Energía del Parlamento Europeo, anunció recientemente la intención de Bruselas de presentar una normativa específica para el sector automovilístico antes de finales de este año. Esta medida forma parte de la Data Act, y su objetivo principal es crear un marco de seguridad jurídica más robusto para todas las entidades involucradas en la industria del automóvil.
La declaración de del Castillo se produjo durante una intervención telemática en ExpoGanvam. En ella, la eurodiputada enfatizó la importancia de esta regulación, argumentando que representa un avance en innovación y competitividad para la industria europea. Lo más destacado de esta propuesta es que los datos generados no estarán exclusivamente en manos de los fabricantes. En cambio, se prevé la creación de un ecosistema más ágil y accesible, abriendo una cantidad casi infinita de datos a nuevos negocios y promoviendo la competencia en igualdad de condiciones. Como resultado, los consumidores podrían beneficiarse de servicios más económicos y optimizados.
Esta ley específica es un complemento a la Ley de Datos que la Unión Europea adoptó en abril de 2023. Con su implementación, se espera que sectores como la distribución (tanto oficial como independiente) y la posventa tengan acceso seguro a los datos generados por vehículos y conductores, siempre y cuando cuenten con el permiso necesario.
Este anuncio es especialmente relevante en el contexto de la evolución hacia vehículos conectados y la eventual adopción de la conducción automática. Muchos actores de la industria ven en estos datos un pilar fundamental para el desarrollo de sus negocios futuros.
Por otro lado, José Manuel Prieto, subdirector general de Calidad y Seguridad Industrial del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, ha matizado la situación actual de esta normativa. Aunque aún no se han definido los detalles específicos, el objetivo es claro: adaptar y especificar las directrices de la Ley de Datos al ámbito del automóvil. Esto implica no solo una adaptación de las normativas existentes, sino también la creación de un marco específico que responda a las necesidades y características únicas de la industria de la automoción.
En resumen, esta iniciativa legislativa marca un punto de inflexión en la manera en que el sector automovilístico europeo manejará y aprovechará los datos. No solo se trata de una cuestión de mejora en la competitividad y la innovación, sino también de una oportunidad para garantizar un acceso más equitativo a la información y, en última instancia, para beneficiar a los consumidores con servicios mejor adaptados y más eficientes. Este es un paso más hacia la integración de la tecnología digital en el corazón del sector automovilístico, preparando el camino para futuros desarrollos y avances en la era del vehículo conectado y autónomo.
