Según los últimos datos de Ganvam y Aedive, las matriculaciones de vehículos híbridos y eléctricos aumentaron casi un 97% interanual en septiembre, alcanzando 178.981 unidades. De hecho, una de cada cuatro matriculaciones ya corresponde a un modelo electrificado.
El crecimiento es claro, pero plantea un desafío: los talleres deben adaptarse a una nueva realidad técnica, mientras que la llegada de estos vehículos a sus instalaciones sigue siendo limitada. La formación especializada se ha convertido, por tanto, en una necesidad estratégica… aunque muchos profesionales todavía no perciben un retorno inmediato de esa inversión.
Formación reglada para afrontar la nueva movilidad
El Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes ha desarrollado dos programas específicos para capacitar a los futuros técnicos del sector:
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Curso de Especialización en Mantenimiento de Vehículos Híbridos y Eléctricos (2021), dirigido a titulados de FP de Grado Medio.
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Curso de Especialización en Mantenimiento y Seguridad en Sistemas de Vehículos Híbridos y Eléctricos (2022), destinado a titulados de FP de Grado Superior.
Estos itinerarios formativos fueron diseñados con la colaboración de marcas como Tesla, Renault, Volkswagen y Jaguar, con el objetivo de incorporar los conocimientos técnicos más actualizados sobre propulsión eléctrica, baterías y seguridad de alta tensión.
Durante el curso 2024-2025, un total de 6.127 alumnos se matricularon en estos cursos, que ya se imparten en diez comunidades autónomas, además de Ceuta y Melilla, según el Ministerio. Sin embargo, su implantación depende de cada administración regional, lo que provoca una oferta desigual entre territorios.
Un parque en transformación, pero aún dominado por motores de combustión
Pese al aumento de las matriculaciones, la mayoría del parque móvil español sigue siendo de combustión interna. El presidente de Ganvam, Jaime Barea, reconoce que “las ventas de eléctricos han superado nuestras expectativas”, pero recuerda que el volumen de vehículos de gasolina y diésel continúa siendo mayoritario.
Barea apunta que las administraciones “debieron anticipar antes esta transición tecnológica”, aunque valora positivamente los esfuerzos actuales para adaptar el sistema formativo y facilitar la incorporación de nuevos profesionales especializados.
Alta empleabilidad, pero falta de vocación técnica
Los estudios relacionados con el mantenimiento de híbridos y eléctricos pertenecen a una de las familias de FP con mayor tasa de empleabilidad, con un 70% de afiliación a la Seguridad Social entre los titulados. No obstante, el sector de la reparación sigue sufriendo escasez de mano de obra cualificada.
Los talleres demandan más profesionales formados, pero también más jóvenes interesados en incorporarse al oficio. Para dar respuesta a esta situación, se han puesto en marcha iniciativas como la Academia Ganvam, que ofrece formación flexible adaptada a los horarios del taller, y el Cuaderno de Recomendaciones de Seguridad en Talleres de Reparación y Mantenimiento elaborado por Ganvam y Aedive.
Obstáculos económicos y estructurales en los talleres
A pesar del interés, la adaptación técnica de los talleres españoles avanza lentamente. En el país existen alrededor de 42.000 talleres dados de alta, de los cuales unos 34.000 permanecen activos, según Ganvam. La mitad son pequeños negocios con uno o dos empleados, lo que dificulta realizar inversiones en formación o equipamiento específico.
El coste medio de un curso de especialización en híbridos y eléctricos ronda los 650 euros, una cifra elevada para muchos pequeños empresarios que aún no reciben vehículos electrificados con frecuencia.
A ello se suma que los coches eléctricos requieren menos mantenimiento correctivo —por su menor número de piezas móviles y sistemas auxiliares— y que gran parte del mantenimiento preventivo se realiza mediante software y actualizaciones remotas, generalmente en los servicios oficiales de las marcas.
El director técnico de Aedive, Javier Izquierdo, lo resume con claridad: “Prácticamente todos los usuarios de vehículos eléctricos acuden a los concesionarios oficiales para sus revisiones”.
Un futuro que exige planificación y apoyo institucional
El sector de la posventa se encuentra ante un proceso de transformación estructural. Aunque la electrificación crece con fuerza en el mercado, su impacto real en los talleres aún es limitado.
Los expertos coinciden en que la especialización técnica será imprescindible, pero advierten que los pequeños negocios necesitan apoyo económico y herramientas de adaptación para poder competir en igualdad de condiciones.
Formarse en movilidad eléctrica ya no es una opción, sino una inversión a medio plazo. Sin embargo, mientras los eléctricos no entren de forma masiva en los talleres, la formación y la realidad del mercado seguirán avanzando a ritmos distintos.
