viernes, 15 de abril de 2016

La Comisión Antipiratería para el Automóvil elimina más de 2.000 páginas con ofertas de software de diagnosis e información técnica ilegales en Internet

Desde el pasado mes de diciembre, la Comisión Antipiratería para el Automóvil (CAPA), en la que ASBOC está integrada a través de CONEPA, ha intensificado la lucha contra las falsificaciones adoptando medidas adicionales contra el ofrecimiento y venta de producto ilegal a través de Internet. La adquisición de este tipo de software de diagnosis e información técnica puede ocasiones importantes perjuicios a los talleres.

Cerrado el primer trimestre del año 2016, CAPA informa de que se han localizado en Internet un total de 3.036 ofrecimientos de producto sospechoso. De la indicada cantidad, han sido efectivamente eliminados de la red 2.137 casos, lo que representa un 70,39% del total de producto sospechoso localizado. Del resto de ofrecimientos, o bien se ha constatado que no son infractores, o bien se encuentran pendientes de confirmación o en tramitación de eliminación.

Desde la reciente implantación por CAPA de un sistema informático específico para estos fines, se han ido incrementando los miembros de CAPA que participan en esta iniciativa de detección y eliminación de producto fraudulento en la red, así como el número de portales o plataformas controladas e investigadas.

¿Por qué, según CAPA, los talleres no deben adquirir equipos, software o programas de información técnica ilegales?

  1. Los talleres somos responsables a efectos legales tanto de la utilización de productos falsificados (aunque dispongamos de la factura de un proveedor), como de la distribución a otros profesionales de información adquirida para nuestro uso propio, puesto que está sujeta a derechos de propiedad intelectual y/o industrial y no puede ser transmitida a terceros. No cumplir la ley puede conllevar importantes sanciones económicas e incluso penales.
  2. Los talleres podemos vernos afectados desde el punto de vista técnico cuando utilizamos producto de origen dudoso. Hay casos documentados en los que, al utilizar software ilegal (incluso sin ser plenamente consciente de ello su usuario), se han causado desprogramaciones totales de las centralitas, que han requerido el paso por servicios oficiales y el pago de facturas cuantiosas que han debido ser asumidas por el taller.
  3.  Si las copias ilegales masivas  de equipos de diagnosis y software (información técnica, actualizaciones de códigos y catálogos electrónicos) continuaran extendiéndose en el mercado, los proveedores legales de ese material podrían dejar de operar en el mismo por falta de rentabilidad. En ese caso, la única vía de acceso a información sobre vehículos (necesaria para poder hacer ciertas operaciones de mantenimiento y reparación) sería la del constructor del vehículo con lo que supone eso de riesgo de monopolio y sus consecuencias. Recordemos que la normativa europea vigente en materia de posventa (Reglamento 461/2010 y normas sobre emisiones contaminantes) subraya la importancia de estimular la competencia en el mercado de la reparación y mantenimiento de vehículos pero siempre en el marco de la legalidad vigente.
  4. Los talleres debemos de ser coherentes en la lucha contra la piratería en la misma medida que exigimos proactividad a las distintas administraciones públicas competentes cuando denunciamos la competencia desleal de los talleres ilegales.
  5. Decenas de talleres figuran como imputados en procesos judiciales por este tema. No es bueno para la imagen del sector  y muy desagradable para profesionales que ven empañada su trayectoria profesional y la de sus empresas.


Cumplir la ley es una obligación de todos. Quien no lo hace se salta las reglas del juego y compite con desleal ventaja.