miércoles, 6 de abril de 2022

La vuelta a la normalidad y la caída del teletrabajo disparan los viajes de negocios en vehículo privado o de empresa

El estallido de la pandemia causada por la Covid-19 paralizó la vida cotidiana, transformando el modelo laboral en un modelo de trabajo en remoto o, a lo sumo, híbrido lo que afectó a los viajes corporativos, entre otros factores. Afortunadamente, la vuelta a las oficinas y la disminución de las restricciones ha influido de forma bastante positiva en las cifras de los viajes corporativos.

La progresiva vuelta a la normalidad tras la pandemia ha generado que el teletrabajo se vaya diluyendo en muchas empresas. Este aspecto se ha reflejado de forma directa en la movilidad, que ha aumentado con respecto al año anterior. En este sentido, un estudio elaborado por Free Now for Business ha desvelado que el coche privado sigue siendo la opción mayoritaria para los viajes de negocios. 

En concreto, la entidad desvela que el 63% de quienes viajan por negocios utiliza su automóvil privado o de empresa para ir al trabajo. Por otro lado, el 31% de ellos desearía utilizar bicicletas o bicicletas eléctricas; un 9% motocicletas; y un 6% patinetes o patinetes eléctricos.

“Aunque no estamos en los niveles prepandemia, el mundo de los negocios comienza a recuperarse y a retomar su actividad habitual, impactando de forma directa y positiva en el sector del taxi y de la movilidad en general”, ha explicado la directora general de Free Now España, Isabel García Frontera.

La movilidad crece con la vuelta a la normalidad

Sólo en lo que se refiere al mes de febrero, los viajes de empresa han crecido un 84% en la comparativa con el mismo mes de 2021, mientras que el crecimiento en enero fue del 55% respecto al mismo mes del año pasado. Esto se explicaría por la vuelta a las oficinas y la reducción de las restricciones, según los datos de Free Now for Business.

De acuerdo con la misma investigación, el 38% de los encuestados prevé un cambio del transporte público al vehículo privado como consecuencia de la pandemia. Sin embargo, la micromovilidad ha experimentado un crecimiento aún mayor. Al 40% de los empleados les gustaría acudir a la oficina en bicicleta, e incluso usarlas para ir a reuniones (37%).

La micromovilidad, una tendencia al alza

La micromovilidad sigue ganando terreno. Según Cetelem, el 42% de los ciudadanos asegura que se ha planteado el cambio del transporte privado de combustión por algún medio de transporte de movilidad urbana como la bicicleta o el patinete eléctrico. Los más dispuestos a ello son, sin duda, los jóvenes de entre 18 y 24 años (66%). Los más reacios son, por el contrario, los encuestados de más de 45 años (34%). 

Este pensamiento se traduce, directamente, en un hábito de compra. De hecho, un 25% de los españoles tiene la intención de comprar una bicicleta o un patinete eléctrico próximamente.