martes, 18 de noviembre de 2025

La Unión Europea moderniza los permisos de conducir: carné digital, nuevas edades mínimas y más seguridad vial

El Parlamento Europeo aprobó el pasado 22 de octubre de 2025 una profunda reforma de la normativa que regula los permisos de conducir en los Estados miembros. El propósito es mejorar la seguridad vial, reducir la siniestralidad y adaptar el sistema a la era digital, en un contexto donde cada año mueren alrededor de 20.000 personas en las carreteras europeas.

La nueva directiva armoniza los plazos de validez, incorpora el permiso de conducir digital y establece una formación más rigurosa para los nuevos conductores. Entrará en vigor 20 días después de su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea, y los países dispondrán de tres años para adaptar sus legislaciones nacionales.

Formación centrada en la seguridad y los usuarios vulnerables

Los exámenes para obtener el permiso incluirán nuevos contenidos que buscan reforzar la conciencia vial y la prevención de riesgos. Entre ellos:

  • Puntos ciegos y maniobras seguras.

  • Uso de sistemas avanzados de asistencia al conductor (ADAS).

  • Apertura segura de puertas para evitar accidentes con ciclistas.

  • Peligros del uso del teléfono móvil al volante.

Con esta actualización, la UE pretende sensibilizar especialmente sobre la protección de peatones, ciclistas y menores, los colectivos más expuestos en las vías urbanas.

Nuevos periodos de validez según el tipo de permiso

La reforma establece una validez estándar de 15 años para los permisos de coche y motocicleta, aunque los Estados podrán reducirla a 10 años si el carné se usa también como documento de identidad.

En el caso de vehículos pesados, la vigencia será de cinco años, mientras que los conductores mayores de 65 años podrían enfrentarse a plazos más cortos, revisiones médicas o cursos de actualización.

Quienes soliciten o renueven el permiso por primera vez deberán superar una evaluación médica inicial (oftalmológica y cardiovascular), aunque se permite sustituirla por formularios de autoevaluación si los países así lo deciden.

Esta flexibilidad responde a peticiones de asociaciones como la Liga de Defensa de los Conductores, que considera discriminatorios los exámenes médicos obligatorios por edad y defiende métodos alternativos que garanticen la igualdad sin comprometer la seguridad.

El carné digital: hacia una movilidad conectada

Uno de los cambios más destacados es la creación del permiso de conducir digital europeo, que podrá almacenarse en smartphones o dispositivos electrónicos.
Este formato se convertirá en el estándar en toda la UE, aunque seguirá existiendo una versión física opcional, que deberá entregarse en un máximo de tres semanas desde la solicitud.

El nuevo modelo permitirá verificar la validez del permiso en cualquier país miembro y simplificará los trámites en caso de pérdida o renovación, avanzando hacia una gestión más ágil y unificada.

Nuevas edades mínimas y sanciones más severas

Los jóvenes de 17 años podrán obtener el permiso B (turismos), siempre que conduzcan acompañados hasta cumplir los 18.
Para el permiso C (camiones), la edad mínima baja a 18 años, y para el permiso D (autobuses), a 21 años, siempre que el conductor disponga del certificado de aptitud profesional.

Durante los dos primeros años de conducción, las infracciones graves —como conducir bajo los efectos del alcohol o drogas o no usar el cinturón— tendrán sanciones más duras, buscando reducir los accidentes entre conductores noveles.

Cooperación europea para sancionar sin fronteras

Otro avance clave es el refuerzo de la cooperación entre Estados miembros. Si un conductor comete una infracción en otro país, las autoridades del país de origen del permiso serán notificadas y deberán aplicar las sanciones o suspensiones correspondientes.

En los casos más graves, los Estados estarán obligados a intercambiar información sin demoras para garantizar la efectividad de las prohibiciones de conducción en toda la UE.

Un paso decisivo hacia una movilidad más segura y digital

La nueva normativa europea marca un antes y un después en la gestión de los permisos de conducción. Al combinar educación vial, control médico, tecnología y cooperación internacional, la UE busca reducir la siniestralidad y modernizar el modelo de movilidad europea.

Con la llegada del carné digital y una formación más consciente, Bruselas aspira a construir un espacio vial más homogéneo, seguro y preparado para los retos del futuro.