miércoles, 29 de julio de 2020

Mitsubishi se va de Europa aunque mantendrá su servicio de posventa

Mitsubishi se va de Europa aunque mantendrá su servicio de posventa
Mitsubishi ha anunciado, casi por sorpresa, que se retira del mercado europeo. No se trata de reducir la inversión, sino simple y llanamente de no renovar los modelos actuales una vez que éstos hayan alcanzado el final de su ciclo comercial.

Esto significa a nivel práctico que de aquí a muy pocos años Mitsubishi ya no venderá coches en el Viejo Continente. En cambio, siguiendo los planes de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, la firma de los tres diamantes se centrará en sus principales mercados: Japón, el sudeste asiático y Oceanía (Australia y Nueva Zelanda).

Este nuevo plan es de aplicación inmediata, según la marca. Así, el Mitsubishi Outlander, el híbrido enchufable más vendido de Europa, no será renovado. El nuevo modelo debía llegar a Europa en la segunda mitad de 2020. Este nuevo modelo, sin embargo, llegará a partir de abril de 2021 en otros mercados. Del mismo modo, adiós al coche eléctrico y a un nuevo SUV que la marca planeaba lanzar en nuestro continente.

Sin fecha concreta

No hay fecha concreta para que Mitsubishi se retire. Al final todo dependerá del esfuerzo comercial que quieran hacer para mantener en venta los modelos actuales. El modelo más reciente de Mitsubishi en Europa es el Eclipse Cross, un SUV compacto, que llegó al mercado en 2017.

Con un ciclo comercial medio para la mayoría de coches de entre seis y ocho años, Mitsubishi podría seguir en Europa unos cinco años más. Pero como todo dependerá de las ventas, el fabricante se podría ir incluso más pronto de lo esperado. La marca mantendrá una presencia mínima para asegurar los servicios posventa y la venta de recambios.

El constructor japonés ha asegurado que no le queda otra opción, pues con pérdidas estimadas de 1.300 millones de dólares para marzo de 2021 (cuando termine su año fiscal), debe reducir sus costes fijos en un 20% y centrar sus inversiones en mercados más importantes y donde ve potencial de crecimiento. Para Mitsubishi, sin embargo, su rentabilidad en Europa está en su peor nivel desde 1975.

Mitsubishi vende coches en el Viejo Continente desde ese año y ha llegado incluso a fabricar en suelo europeo, en concreto en Holanda de 1995 a 2012. Por cierto, esa factoría, que había sido de DAF, es la que vendió al grupo holandés VDL y que ahora fabrica el BMW X1 así como el Mini Countryman, entre otros.

El fabricante podría retirarse también del mercado estadounidense. Y es que Estados Unidos, en el plan de la Alianza, es para Nissan. Y Mitsubishi ha vendido en el año fiscal 2019 en el mercado estadounidense poco más de 120.000 coches, eso es menos que Subaru o Tesla.

Mitsubishi no es la única

Aunque la noticia de que Mitsubishi abandonará el mercado europeo en un tiempo prudencial sorprendió a muchos, una decisión de ese tipo, en este caso amparada en el nuevo reparto de mercado global de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, no es nueva en el sector del automóvil. Antes muchas otras marcas de coches ya decidieron dejar de vender en Europa.

A lo largo de la historia gigantes, no son pocos los gigantes asiáticos y americanos del automóvil que, una vez alcanzada una cuota de mercado considerable en sus mercados maternos, han puesto la vista en Europa para tratar de hacer crecer sus ventas y por tanto sus beneficios. Una aventura que, sin embargo, no acabó saliendo bien.

Sin ir más lejos, el año pasado fue Infiniti, la marca de lujo de Nissan, quien anunció que en un margen de tiempo muy pequeño dejarían de operar en Europa para centrarse en Estados Unidos y China. Y si nos remontamos unos años atrás, en 2013 fue General Motors quien anunció que Chevrolet abandonaba nuestro mercado para fortalecer Opel y reintroducir Cadillac. El mismo camino habían seguido Daewoo, que había dado el relevo de sus modelos a Chevrolet, o Chrysler.

Y tras Mitsubishi, y a la vista del reparto realizado por la Alianza, le podría seguir en breve Nissan que se centraría en Norteamérica, China y Japón, para dejar de operar en el continente europeo para no competir con Renault que son los que tienen asignado este territorio.