El mes de abril dejó cifras negativas para la industria del automóvil en España. La producción de vehículos cayó un 7,4%, situándose en 193.541 unidades, según los datos publicados por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac). Esta contracción se explica, en parte, por dos factores coyunturales que afectaron a las factorías nacionales: la celebración de la Semana Santa en abril —cuando en 2024 fue en marzo— y el apagón eléctrico del 28 de abril, que obligó a detener líneas de producción en varias plantas.
Este retroceso ha borrado los signos de recuperación registrados en marzo, cuando la producción aumentó cerca de un 7%, beneficiada entonces por el efecto calendario. Sin embargo, la tendencia general en 2025 sigue siendo descendente.
Tendencia a la baja desde comienzos de año
Entre enero y abril, la producción acumulada alcanzó las 784.423 unidades, lo que representa una caída del 9,2% respecto al mismo periodo del año anterior. Este descenso no es un fenómeno aislado: responde a una desaceleración de la demanda en los principales mercados europeos, donde se comercializa la mayoría de los vehículos producidos en nuestro país.
José López-Tafall, director general de Anfac, ha advertido que, más allá de factores puntuales como el apagón o los días festivos, lo preocupante es la débil demanda estructural tanto en España como en Europa. “Es fundamental recuperar el mercado nacional y europeo, y asegurar que esté abastecido con vehículos fabricados aquí. Solo así se podrá reforzar nuestra actividad industrial y proteger el empleo en el sector”, subrayó.
La producción de eléctricos también se resiente
La fabricación de vehículos eléctricos en España ha caído un 23% entre enero y abril, reduciendo su cuota en la producción total nacional hasta el 5%, lo que supone una pérdida de 0,9 puntos porcentuales. En el mes de abril se ensamblaron 9.786 unidades eléctricas, un 41% menos que en el mismo mes del año anterior.
Este retroceso se produce en un contexto en el que la electrificación del parque móvil es uno de los grandes retos de la industria automovilística. La disminución de la demanda, los elevados precios y la falta de incentivos efectivos parecen estar detrás de esta tendencia a la baja.
Exportaciones en descenso
La exportación de vehículos también cayó un 12% en los cuatro primeros meses del año, hasta 673.066 unidades, lo que representa un 85,8% del total de la producción nacional. Este porcentaje es 2,4 puntos inferior al registrado en el mismo periodo de 2024.
La salud de las exportaciones es crucial para el sector, ya que una gran parte de los vehículos fabricados en España se destinan a mercados exteriores. El descenso en las entregas a países europeos —principalmente Alemania, Francia e Italia— refleja una ralentización generalizada del consumo en el continente.
