viernes, 9 de marzo de 2018

¿Perjudicará a los coches diésel la nueva ITV?

¿Perjudicará a los coches diésel la nueva ITV?
Parece que al diésel le puede surgir un 'enemigo' más a los que ya tienen y viene acumulando de un tiempo a esta parte, algo que ha provocado que sus matriculaciones se resientan, si bien, los propios fabricantes consideran que esta 'mala prensa' será pasajera.

Ya contamos en la web de Asboc que a partir del 20 de mayo de este año entrará en vigor la nueva ITV que supondrá importantes novedades tanto para los usuarios como para las propias estaciones de inspección. Éstas deberán efectuar unas inspecciones más exhaustivas, lo que puede que provoque un mayor número de rechazos, algo que podría beneficiar a los talleres.

Y es que, entre otras cosas, la nueva ITV pondrá especial foco en los vehículos más contaminantes y en los que están en peor estado, pues, entre otras cosas, la nueva normativa permitirá una inspección más exigente, especialmente en lo referente a emisiones contaminantes, y estará mejor preparada para detectar posibles fraudes y manipulaciones en los automóviles.

En este sentido, Javier Llamazares, director general de Fesvial (Fundación para la Seguridad Vial), ha asegurado que la implantación del sistema de diagnóstico a bordo del vehículo (OBD, por sus siglas en inglés), que permitirá entrar en las centralitas electrónicas de los vehículos, “puede dejar fuera del parque a muchos vehículos porque el control de las emisiones será más exhaustivo”.

¿Más pasos por el taller?

Aunque desde la asociación de empresas de inspección técnica AECA-ITV y Conepa, federación de asociaciones de talleres de la que Asboc es miembro, aseguran que los vehículos más viejos, pero bien mantenidos, no serán rechazados en la inspección, todo apunta a que "a los más contaminantes les va a tocar pasar por el taller para abordar las deficiencias", afirma Llamazares.

A su juicio, “los diésel, anteriores al año 2000, serán los más perjudicados, aunque habrá un periodo de seis o siete meses para adaptarlos”. Sin embargo, Arturo de Miguel, responsable técnico del RACE lo hace extensible a los diésel anteriores a 2006, “aunque dependerá de la marca y el coche”.

Por otro lado, es más que probable que la nueva inspección técnica de vehículos será más cara, porque será más larga y compleja, además de por las inversiones que tendrán que hacer los centros al estar obligados, como ya hablamos en la web de Asboc, a introducir la prueba de diagnosis en cada inspección técnica, por lo que necesitarán los equipos necesarios para efectuarla.